Este hecho habría ocurrido en los últimos días entre los intoxicados se encuentran pequeños de corta edad. Al parecer, cinco integrantes de una misma familia, entre los que se encuentran mayores y menores de edad, habrían consumido carne picada, que no habría sido cocinada de manera conveniente y así contrajeron la enfermedad.
Con el paso de las horas estas personas comenzaron a sufrir de fiebre, diarrea y vómitos, por lo que se movilizaron hasta el hospital Gomendio. Allí se le realizaron los análisis correspondientes que arrojaron la presencia de salmonella.
De las cinco personas afectadas, dos -un mayor y un menor- quedaron internados y el resto recibió tratamiento ambulatorio.
Qué es la Salmonella
La fiebre tifoidea y paratifoidea, también denominada Salmonella, es provocada por una bacteria que se puede encontrar en el agua o en alimentos contaminados o con heces u orina de un enfermo o un portador, entre los que puede enumerarse las carnes de pollo, vaca, cerdo, en huevos, frutas, vegetales, y procesados. Según advierte el Ministerio de Salud nacional, el periodo de incubación puede extenderse desde “tres días hasta tres meses, por lo regular con límites de una a tres semanas”.
Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), “por cada caso de Salmonella confirmada con pruebas de laboratorio, casi otros 30 casos no se notifican. Esto se debe a que la mayoría de las personas que presentan síntomas de enfermedades transmitidas por los alimentos no van al médico ni envían una muestra a un laboratorio”. Además, esta enfermedad puede encontrarse en animales, ya que existen portadores transitorios o permanentes.
Más allá de que la mayoría de las personas no presentan síntomas o de hacerlo son leves, otros que tienen más probabilidades de desarrollar un cuadro grave: los menores de cinco años, los mayores de 65 y los inmunocomprometidos.
Salmonella: cuáles son los síntomas
Según señala la ANMAT, por lo general la salmonelosis se autolimita en personas sanas con sistema inmune intacto y la mortalidad es menor al 1%, aunque algunos pacientes deben ser hospitalizados o tomar antibióticos.
Los síntomas comienzan entre seis y 72 horas después de la exposición y duran de cuatro a siete días, dependiendo de factores del huésped, dosis ingerida y características de la cepa, siendo que el intestino puede tardar varios meses hasta volver a la normalidad. La mayoría de los afectados se recuperan en cuatro o siete días sin tratamiento con antibióticos. El estado de portador temporal puede prolongarse varios meses, cerca de 1% de los adultos y alrededor del 5% de los niños menores de 5 años pueden excretar el microorganismo durante un año.
Entre los síntomas más comunes se encuentran:
Náuseas
Vómitos
Dolores abdominales
Diarrea
Fiebre
Dolor de cabeza
Los signos de alarma son:
Diarrea y fiebre alta (superior a los 38°) de al menos tres días de evolución
Diarrea que no mejora por más de 3 días
Heces con sangre
Vómitos prolongados que no permiten que mantenga los líquidos en el cuerpo
Signos de deshidratación (producción muy escasa de orina, sequedad de la boca y la garganta, o mareos al ponerse de pie)
Calambres abdominales por más de 8 horas
Fiebre alta, que puede llegar a convertirse en fiebre tifoidea