El Intendente Municipal, Mauro Poletti, no se mantuvo ajeno a los acontecimientos vividos entre la madrugada y la mañana de este viernes, y con posterioridad al desalojo, recibió a un grupo de los vecinos que estaban usurpando el lugar. La charla se dio en buenos términos y aseguro, que les dejó claro que él, no avalaba los hechos de usurpación.
“lo primero que les dije fue que nunca avalé este tipo de situaciones, porque están fuera de la ley, en su momento así lo manifesté, y ellos mismo me lo reconocieron. Algunos dijeron que había sido Perie, después que los había traído yo, pero les aseguro que los mismos vecinos saben que no fue así, porque ni yo, ni el ex Intendente, incentivamos la usurpación. Algunos vivos les dijeron que se metiesen, hasta les dieron un croquis del terreno que podía ocupar cada uno y que, si ganaba otra opción política las elecciones de octubre, no se iban a tener que ir de ahí”, así comenzó Poletti el contacto con los medios locales, dejando en claro que él y el ex intendente Perie, no habían tenido nada que ver con esta usurpación, cómo se había barajado en medio de la última campaña preelectoral y también, con posterioridad.
Ante la repregunta sobre a quien se refería, respondió:” Pregúntenles a los vecinos, quienes le llevaron plata y mercadería para que los voten”.
Un grave problema de años
Ramallo viene experimentando un grave problema habitacional, que lamentablemente va en permanente crecimiento. Los terrenos han aumentado de manera exponencial en los últimos 15 años -en ese sentido, hubo un antes y un después de la radicación de empresas en la región- e hizo que sea un bien casi inalcanzable para muchos vecinos. A eso, en el pasado reciente y mucho más en la actualidad, se le sumó la suba en los alquileres y eso profundizó la crisis habitacional
“Nosotros como gobierno y los concejales en el rol que les cabe, tenemos que trabajar en esta problemática, porque los vecinos que fueron desalojados son de Ramallo. Todos los actores políticos tenemos que estar involucrados, porque si hoy tenemos 600 u 800 familias que no tienen donde vivir, en unos años habrá el doble. En el proyecto que elevamos el miércoles se prevé la compra por parte del municipio de una parcela de tierra, que posteriormente se le venderá en cuotas a quienes no tienen ninguna oportunidad de llegar a un terreno propio. Le daremos a los concejales toda la información que crean necesario para que podamos llegar a buen término esta iniciativa”, dijo al cerrar el contacto.